Antes de comprar una sartén, debemos tener un criterio claro que te permita elegir la mejor opción para tus necesidades, más allá de las modas y últimas tendencias que suelen sacudir el mercado cada cierto tiempo.
Las sartenes se pueden dividir en dos grandes grupos: por un lado tenemos las sartenes tradicionales que pueden ser de acero inoxidable o hierro fundido y por otro, las sartenes antiadherentes de Teflón o cerámica.
Cada tipo de sartén tiene sus pros y sus contras.
En las cocinas profesionales solemos encontrar sartenes de acero inoxidable con las que se cocinan infinidad de platos; distribuyen el calor de manera homogénea y permiten que la carne tenga el aspecto dorado que la hace irresistible.
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En el aspecto negativo, las sartenes de acero inoxidable suelen ser más difíciles de limpiar y determinados alimentos se nos pueden llegar a pegar, salvo que se añada la cantidad suficiente de aceite o mantequilla.
En los hogares, es más frecuente encontrar sartenes antiadherentes que permiten cocinar con menos grasas. Son sartenes fáciles de limpiar y de usar; no necesitamos conocer ninguna técnica especial para cocinar con ellas. Son cómodas y suelen ser muy apropiadas para aquellas personas que no cocinan de manera habitual.
Al igual que ocurre con las sartenes de acero inoxidable, las antiadherentes, también tienen sus desventajas y, aunque podemos encontrar sartenes antiadherentes a buen precio, estas no suelen durar mucho, y cada cierto tiempo tendremos que reponerlas.
Si las sartenes antiadherentes son de Teflón, debemos tener cuidado y no calentarlas por encima de los 260ºC, ya que desprenden gases tóxicos. Hay que dejar claro que el teflón (PTFE) es inerte (no reacciona) y aunque lo ingieras accidentalmente no va a pasar nada ya que tu organismo lo elimina sin mayor problema.
Una alternativa al Teflón es la cerámica, libre de PFOA y PTFE, aunque dentro de las sartenes de cerámica hay una gran diversidad de calidades, por lo que no sería sorprendente que las sartenes de cerámica más baratas no fuesen tan «verdes» y saludables como se supone que deberían serlo.
En general, a la hora de comprar una sartén, debes mirar estos 8 puntos clave
Una vez que ya sabemos cómo evaluar cualquier sartén, ya solo nos queda encontrar aquella que mejor se adapte a nuestras necesidades.
Las preguntas clave que te debes hacer antes de comprar una sartén
¿Qué tipo de comida vas a cocinar con la sartén?
Las sartenes de acero inoxidable con una base de cobre o aluminio, suelen ser ideales para dorar carnes y conseguir superficies crujientes.
En cambio, las sartenes antiadherentes van mejor para cocinar con poca grasa, algo que debes tener en cuenta si estás siguiendo alguna dieta para adelgazar.
En este sentido, ambos tipos de sartenes son complementarias.
¿Para cuántas personas vas a cocinar?
Elegir el tamaño de la sartén va a depender de la cantidad de comida que tengas que preparar en ella.
Las más usadas suelen ser las de tamaño medio de un diámetro de 20-26 cms. Si embargo, estas resultan grandes para cocinar para una persona y pequeñas para hacerlo para un gran grupo.
¿Qué tipo de cocina tienes?
No todas las sartenes funcionan igual en todos los fuegos.
Los mayores problemas suelen darse en las cocinas de inducción con las sartenes de cerámica.
A pesar de que el fabricante de la sartén indique en el etiquetado que son aptas para inducción, no siempre responden bien en este tipo de cocinas.
¿Cuánto tiempo vas a dedicar a limpiar la sartén?
Está claro que a nadie le gusta pasarse el día limpiando sartenes.
Lo que ocurre es que no todas son aptas para el lavavajillas y si no las lavas a mano pueden estropearse, como vimos en las sartenes de cerámica.
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que costo tiene los sartenes de fibra y que costo tiene los de acero inoxidable. gracias
Hola Maria Eugenia, ya hemos actualizado la información en el artículo.