Lo bueno del café es que puedes encontrar infinitas maneras de prepararlo, y siempre podrás encontrar una cafetera que haga el café a tu gusto.
El 90% de los cafés que nos tomamos están hechos con alguno de los sistemas que podríamos llamar «habituales»: cafeteras italianas, de espresso, de goteo o cafeteras de cápsulas. Sin embargo, existen otros sistemas para preparar el café que los verdaderos amantes del café suelen conocer.
Cada sistema de elaboración del café, tiene su propia técnica que hace que los resultados (utilizando el mismo grano de café) sean muy distintos entre sí. Es interesante probarlos cuando nos sea posible, tal vez así podamos descubrir nuevos aromas y sabores del café que hasta ahora nos resultan desconocidos.
Si además encontramos un sistema económico que posibilite hacer un buen café, casi estamos obligados a probarlo. Este sería el caso de las cafeteras de émbolo.
Las cafeteras de émbolo, también conocidas como cafetera francesa, prensa francesa o cafetera de pistón, fueron inventadas en el S. XIX. A día de hoy no son únicamente piezas de museo; se siguen utilizando, y los que han hecho café con ellas están encantados.
Si después de tantos años siguen plenamente vigentes, por algo será.
¿Cómo son las cafeteras de émbolo?

Son cafeteras muy simples que constan de:
- un recipiente cilíndrico de cristal y aluminio (no siempre) en el que se pone el café y el agua caliente;
- un disco perforado unido a un eje vertical que hace las veces de filtro y permite separar el café molido del líquido. Dependiendo del modelo nos encontraremos con que este disco es más o menos sofisticado, pudiendo incluir una cruceta para colocar los filtros, por ejemplo.
¿Cómo se hace café con una cafetera de émbolo?
Primero colocamos el café en el recipiente cilíndrico de la cafetera de émbolo, dependiendo de cómo te guste el café, pondrás más o menos cantidad, como referencia se pueden poner unos 15-20 gramos de café molido por unos 250 ml. de agua caliente.
El café no debe estar molido con un gránulo demasiado fino, de lo contrario el émbolo se puede atrancar y el café no sale igual de bueno que si el gránulo es más grueso.
A continuación se vierte agua caliente que hemos preparado aparte. El agua debe estar a unos 95ºC, antes de que empiece a hervir.
Se deja reposar unos 4 minutos para que el agua caliente empape bien el café. Es importante que todo el café quede empapado por igual, por lo que al echar el agua debes tener mucho cuidado de repartir bien el agua.
Pasados los 4 minutos, el café está listo para tomar.
Este sistema permite obtener un café suave, aromático que podemos regular a nuestro gusto según la cantidad de café que pongamos en la cafetera.
Cafeteras de émbolo
Hay varios fabricantes especializados en este tipo de cafeteras de émbolo, uno de los más prestigiosos es Bodum que ofrece cafeteras de émbolo desde [amazon text=precios muy económicos&asin=B00264FVES] con todas las prestaciones básicas que permiten hacer un buen café.
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